Avances y próximas acciones de la operación ‘Cangrejo Negro’

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El Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible y la Corporación Ambiental Coralina, presentaron los principales avances en desarrollo de la ‘Operación Cangrejo Negro’; estrategia trazada desde el Sistema Nacional Ambiental (SINA), para el proceso de restauración de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, tras el paso de los huracanes ETA e IOTA en 2020.

Al respecto, el sanandresano Erick Castro, Director de Asuntos Marinos, Costeros y Recursos Acuáticos de dicho ministerio; designado a la vez como Gerente de la Operación, ofreció un reporte del trabajo adelantado y de las estrategias a seguir implementándose por el SINA y las entidades participantes, como Parques Nacionales, Ideam, Invemar, los institutos Humboldt y Sinchi, la Corporación Coralina, Corales de Paz y el Club Rotario, entre otras.

“No ha sido tarea fácil, en noviembre 2020, cuando empezamos el trabajo en Providencia, las condiciones de trabajo para los científicos e investigadores eran muy complicadas. No había energía, ni forma de llenar los tanques de buceo, Coralina había perdido sus lanchas; sin embargo, logramos muy rápidamente entre ese mes y diciembre, estructurar la operación Cangrejo Negro como estrategia de restauración”, explicó.

La Operación tiene trazados 27 objetivos y 54 actividades (41 para el Archipiélago y 13 exclusivas para Providencia), con una inversión inicial estimada superior a los 19 mil millones de pesos. De esta suma están ya invertidos o en proceso de inversión a la fecha y hasta finalizar el año, cerca de $14 mil millones, “quizás el presupuesto de la misma Corporación para todo un año”, apuntó Castro.

Principales avances

La elaboración del diagnóstico rápido del impacto de los huracanes ETA e IOTA. En efecto, Inicialmente, se dio paso al desarrollo de los diagnósticos para determinar la magnitud de los daños naturales, cuando, con toda la rigurosidad científica, fueron evaluados cinco ecosistemas estratégicos, concentrados principalmente en Providencia: bosques secos, corales, manglares, playas y pastos marinos.

El resultado de este fue bastante devastador: en el caso de la vegetación, más del 90% se vio afectada; sin embargo, en el tema de los corales fue más alentador de lo esperado.

“Tuvimos daños en los primeros once o doce metros, pero después de eso, no muchos corales se vieron afectados; distinto a lo sucedido en el sector occidental de San Andrés, donde tuvimos mayores afectaciones”, diferenció Castro. Dicho diagnóstico inicial fue complementado con una expedición científica realizada en enero de 2021, con 31 investigadores de las diferentes entidades.

Estas apreciaciones permitieron ampliar el diagnóstico para construir luego el Plan de Acción Específico (PAE), aprobado por el Consejo Nacional de Gestión del Riesgo, que viene siendo la ruta de navegación de la operación.

Instalaciones operativas

Con la instalación, mantenimiento y operación de las estaciones automáticas hidrológicas, meteorológicas y de radio-sondeo, adelantada con el liderazgo del Ideam y el apoyo de Coralina e Invemar, se logró rescatar 13 de las 14 estaciones operativas de la entidad, que habían quedaron destruidas.

“Si no hubiésemos recuperado rápidamente estas estaciones meteorológicas, por ejemplo, el aeropuerto de Providencia no hubiese podido funcionar”, indicó el gerente.

Igualmente se destacó la limpieza del material vegetal muerto mediante el dispositivo de ‘chipeado’ (procesamiento mecánico de ramas, despuntes y postes). Para ello fueron desplazadas hacia Providencia cuatro máquinas ‘chipiadoras’, alcanzado a procesar más de 540 toneladas de material vegetal; elementos que representaban “una hoguera en potencia” por lo que durante el primer semestre, además, se adelantaron intensivas campañas para prevenir incendios forestales.

Monitoreo de los pastos marinos y arrecifes

En diciembre fueron rescatadas 1.534 colonias de coral de 17 especies que estaban volcadas; además, se desarrolló el monitoreo de pastos marinos y arrecifes en las islas. A partir de ahí surgió el proyecto de restauración coralina, donde se han sembrado más de 10 mil fragmentos de coral entre las 11 guarderías existentes (cuatro en Providencia y siete en San Andrés). Una labor de alta incidencia e importancia ambiental para la reserva de biosfera Seaflower.

Recolección de residuos especiales

A través de una campaña liderada por Coralina, fueron recolectadas 54 toneladas de residuos especiales, entre medicamentos, pilas, baterías de plomo, ácidos, llantas y demás, que no solo se sacaron de la isla, sino que hicieron parte de un proceso de Economía Circular.

También fueron vinculadas al programa ‘Incentivos económicos a la conservación’, 320 familias para la recuperación y preservación de frutos y plantas nativas, a través de la siembra y construcción de tres viveros que dieron pie a rescatar y propagar dichas especies. A la fecha, estas familias han recibido incentivos a la conservación por valor total de 805 millones de pesos; un apoyo a la reactivación económica a cada una de ellas.

Próximas acciones

Continuará la siembra de corales en el archipiélago por medio del programa ‘Restaurando un millón de corales por Colombia’. De cuyo volumen, una significativa cifra será sembrada en áreas del Distrito de Manejo Integrado del Área Marina Protegida Seaflower y el Parque Nacional Natural McBean Lagoon.

Se invertirá en el Parque McBean Lagoon, una suma cercana a los 580 millones de pesos para la restauración de sus ecosistemas y especies claves. Estos recursos son del programa ‘Riqueza Natural’ de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAid).

Se rehabilitará el sector eco turístico de Crab Cay, con una inversión superior a los 1.275 millones de pesos. Se hará la recuperación de la sede operativa de Rocky Point y la expedición ‘Seaflower Plus 2021’, en el mes de septiembre que tendrá un costo total de 1.640 millones de pesos.

Al respecto de esta expedición, Castro manifestó que será un tanto diferente a las que se han realizado en años anteriores: será igualmente liderada por la Comisión Colombiana del Océano (CCO), pero participarán todos los institutos del Sistema Nacional Ambiental.

¿Reactivación en Providencia?

“La expedición será vía terrestre y marina y tiene como punto diferencial que vamos a poder actualizar todos los mapas de cobertura del bosque, de los corales, de los pastos, no solo de San Andrés y Providencia sino también, en Serrana, Quitasueño y Roncador, donde pasó el huracán de frente y a donde aún no hemos ido oficialmente”, añadió.

Por último, el director de Coralina, Arne Britton, dijo que después del huracán IOTA, el SINA –encabezado por el Ministerio y Coralina– agilizó un proyecto que ya estaba en curso, en el que el Fondo de Compensación Ambiental había asignado un cupo de 4.300 millones de pesos para apuntar a la meta de los 180 millones de árboles sembrados a 2022.

Este proyecto incluía tanto a Providencia como a San Andrés, sin embargo, por el gran impacto ecológico que se generó en el municipio, este recurso solamente será ejecutado allí y consta de cuatro componentes: restauración de manglares, bosques, todo lo concerniente a la afluencia hídrica y huertas caseras. De aquí a diciembre, este proyecto tiene como meta alcanzar las 22 mil plántulas de varias especies sembradas en dichos ecosistemas.

“No queremos decir con esto, que $4.300 millones van a resolver el problema de restauración en Providencia, eso vale mucho más… Pero vamos a tener 120 jornaleros trabajando en la recuperación y vamos a articular a más familias en este proyecto, de tal manera que unamos esfuerzos y podamos lograr esa restauración natural”, concluyó.