Razón tiene la Procuradora Regional, Edith Carreño, cuando advierte que hay serios motivos de preocupación que darían lugar a abocar una investigación disciplinaria, tras el debate sobre los subsidios a la vivienda nativa llevado a cabo en la Asamblea Departamental.
Que hayan transcurrido desde el acta de adjudicación hasta la fecha 34 meses sin que se hayan concluido las obras, es de por sí cuestionable; pero que entre los beneficiarios hayan asomado siete inesperadas ‘posadas nativas’, es ciertamente inexplicable.