Sin toda la participación ni la articulación requerida para este tipo de eventos, pasó por San Andrés el tardíamente anunciado 'II Simulacro de respuesta por huracán'. Ejercicios tan necesarios ameritan una planificación y socialización mucho más incluyente con la población. El llevado a cabo este viernes en la isla lució, más bien, como un entrenamiento para las unidades de socorro y las fuerzas militares. Los huracanes reales 'avisan' --gracias a Dios--, los simulacros deberían hacerlo mucho más aun.