Un avión Boing 737-700 de la aerolínea Aires sufrió un grave accidente cuando aterrizaba a la una y 40 de la madrugada en el aeropuerto Gustavo Rojas Pinilla de San Andrés en medio de una fuerte tormenta, informó el coronel Gustavo Barrero Barrero, comandante del Grupo Aéreo del Caribe de la Fuerza Aérea Colombiana (FAC).
Las primeras informaciones dan cuenta de que la aeronave -de matrícula HK 4682 que volaba con 122 pasajeros y seis tripulantes- fue afectada por un potente rayo cuyo sonido atronador que se escuchó en toda la isla.
El avión está literalmente partido en tres partes de su fuselaje.
Intensa tormenta
“La aeronave que cubría el trayecto Bogotá-San Andrés aterrizaba en medio de una intensa tormenta eléctrica, cuando un potente rayo habría ocasionado su descontrol en la cabecera de la pista 06”, informó Barrero.
Los primeros heridos fueron evacuados en ambulancias y otros carros particulares hacia el Hospital Departamental Amor de Patria; la Clínica Villareal y a Sanidad Portuaria. Hasta el momento las autoridades han reportado el fallecimiento de una mujer que dejo de existir en el hospital.
La aeronave estaba al mando del capitán Wilson Gutiérrez, oriundo de Medellín que fue trasladado a la Clínica Villareal con el resto de la tripulación y 32 pasajeros, en tanto al Amor de Patria fueron llevadas unas 70 personas que son atendidas a esta hora.
El propio gobernador, Pedro Gallardo Forbes, se apersonó de la evacuación del personal herido desde el aeropuerto y se trasladó posteriormente al hospital con el secretario de Salud, el médico José Antonio Rodríguez Robles para ayudar durante la emergencia.
El accidente activó al Comité Regional de Prevención y Atención de Desastres (Crepad) cuyos miembros trabajan en todos los frentes para superar la emergencia generada por el accidente.
Gallardo Forbes, informó oficialmente desde el Hospital Amor de Patria de San Andrés, sobre el fallecimiento de una mujer mayor de edad, agregando que hay cinco heridos más de gravedad –incluido un menor edad- ingresados a quirófanos.
“Lamentamos profundamente este accidente, les enviamos nuestras sentimientos de solidaridad a los familiares de los afectados, pero al mismo tiempo damos a gracias a Dios por que las consecuencias pudieron haber sido aun mucho más graves”, precisó el gobernador.