Luego de más de tres semanas de negociaciones, los empresarios y los sindicatos no se lograron poner de acuerdo sobre el aumento salarial para el próximo año. El presidente Gustavo Petro definió el aumento por decreto. En 2025 el salario mínimo que devengan 3,7 millones de colombianos será de 1.423.500 pesos.
Tras varias semanas de negociaciones en la mesa de concertación de políticas laborales y salariales, finalmente quedó definido el aumento del salario mínimo. Sin embargo, el porcentaje no se definió por acuerdo, sino por decreto.
Este año no hubo acuerdo al igual que en otras 18 ocasiones desde que se creó el mecanismo actual de definición del salario mínimo. Por eso, en un colegio del municipio de Zipaquirá, Cundinamarca, el presidente de la República Gustavo Petro hizo el anuncio público para los colombianos de cuánto subirá el salario mínimo el próximo año: un incremento de 9,5 por ciento.
"Este es el regalo de Navidad para la clase trabajadora de Colombia", dijo el presidente Petro en su intervención. Así el salario mínimo subirá a 1.423.500 pesos, y con el auxilio de transporte subirá a 1.623.500 pesos.
¿Por qué no se logró un acuerdo?
Aunque todos los años en diciembre se sientan a conversar los empresarios, los sindicatos y el gobierno para buscar un acuerdo frente al incremento del salario mínimo, lo cierto es que han sido más los desacuerdos que los puntos comunes.
Solo en 10 de 29 ocasiones, incluyendo esta, el aumento del salario mínimo ha sido concertado por las partes. En esta oportunidad, los gremios y los sindicatos estaban separados por una diferencia de alrededor de 65.900 pesos.
Las centrales de trabajadores se casaron con una petición de 12 por ciento. Con esa propuesta el salario mínimo para 2025 hubiese sido de 156.000 pesos para que el mínimo llegara a 1.456.000 pesos.
Factores que inciden en el aumento
Para definir el aumento del salario mínimo se tienen en cuenta varios factores, pero los dos elementos principales en la mesa de negociación todos los años son dos: inflación + productividad. Una fórmula que suele utilizarse como la base de la negociación, pues por ley, el salario mínimo no puede subir por debajo de la variación del índice de precios al consumidor (IPC), para preservar el poder adquisitivo de los colombianos.
Para este año entonces el punto de partida para el incremento salarial era el dato de 5,2 por ciento que registró la inflación al cierre de noviembre, mientras que el aporte de la productividad total al crecimiento de la economía fue 1,73 por ciento, según la cifra que entregó el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane).
Con esos dos elementos el aumento salario mínimo podría haber sido como mínimo de 6,93 por ciento o 90.090 pesos, para llegar a 1’390.090 pesos. Aunque los empresarios nunca quisieron dar una cifra en la mesa de concertación, se presume que era cercana a este valor.
De hecho, en la mañana del martes 24 de diciembre cuatro de los cinco gremios empresariales que hacen parte de la mesa de concertación —Andi, Fenalco, Asobancaria y la Sociedad de Agricultores de Colombia— emitieron una comunicación a la opinión pública en la que informaron que en días pasados le entregaron de forma confidencial al Ministerio de Trabajo “la autorización para buscar un acuerdo que se enmarque dentro de una cifra máxima que tuviera en cuenta la inflación del año 2024, más el dato de productividad total de los factores que había informado el Dane”.
(Con información de Revista Cambio)
