Este sábado 25 de marzo se realizó la Audiencia Pública convocada por la Comisión Séptima del Congreso de la República, espacio durante el cual se socializó el proyecto de Reforma a la Salud que promociona el Gobierno nacional y se escucharon propuestas de la comunidad isleña en relación a este tema.
La iniciativa, gestionada por la congresista Elizabeth Jay-Pang, contó con la asistencia de la directora de Prestación de Servicios y Atención Primaria del Ministerio de Salud, Libia Esperanza; de la representante por la Circunscripción de Curules de Paz, Karen López; y el representante a la Cámara por Arauca y ponente de la reforma, Roberto Rozo.
Al respecto, Rozo comentó que persiste un maltrato hacia las comunidades más alejadas del país: "este sistema de salud se ha estancado y se ha centralizado en las ciudades más importantes; los habitantes de zonas apartadas como San Andrés y Providencia, tienen la esperanza que a través de la reforma cambien algunos aspectos esenciales".
El congresista agregó que las demandas prioritarias de los habitantes son: dotación a los hospitales públicos y fortalecimiento de la red pública hospitalaria, que permitan a todos los ciudadanos acceder a los servicios en condiciones de igualdad; mejor dotación tecnológica; y capacitación al personal, para dignificar el tratamiento a los usuarios.
Participación virtual
Por otra parte, la ministra Carolina Corcho aseguró en conexión virtual que en los últimos días ha dialogado con miembros de la sociedad civil, con miras a llegar a acuerdos en cuanto a la propuesta de la reforma.
"Hay optimismo porque se han sostenido reuniones con los partidos políticos de la coalición de Gobierno y con personas que piensan muy distinto a nosotros, para entregarle una propuesta a la comisión séptima de la Cámara de Representantes, que finalmente es la que decide", aseguró.
Durante su intervención, la ministra también reconoció que los cambios siempre generan miedo e incertidumbre. Sin embargo, advirtió: "Quisimos escuchar de dónde provienen esos miedos (…) Por eso, es importante que el Gobierno escuche, porque con la reforma a la salud tenemos que acertar y entre todos para construir la mejor propuesta", enfatizó.
Otros puntos clave del proyecto
Al abordar más temas de la reforma, la ministra propuso que las instituciones de salud del Estado sean financiadas por oferta y no por venta de servicios, en busca de que se conviertan en puerta de entrada a la prestación de la salud y para que sus directores se centren por fin en la gestión y no en el tema financiero.
Dijo también que los hospitales deben atender a la población durante 24 horas al día y que esto tiene que darse, independientemente de la rentabilidad de estas instituciones. "En este sentido, proponemos un pacto social para que todo bebé nazca en condiciones de igualdad, que todo colombiano y colombiana sea igual ante el sistema de salud y que ese sistema no genere ningún tipo de discriminación".
Corcho aprovechó para aclarar que el proyecto de ley no estatiza el sistema, sino que reconoce los aportes del sector privado, que hoy en día tiene el 80% de la prestación del servicio de salud. "En el acuerdo, ellos podrán coadyuvar en una parte con la administración de los recursos de la salud".
Algunos compromisos adquiridos
Por otra parte, la gerente de la Empresa Social del Estado (ESE) Hospital Clarence Lynd Newball, Maria Claudia Bracho, dijo que ya hay algunos compromisos de relevancia adquiridos por parte del Ministerio.
Al respecto, informó que se van a iniciar las primeras obras de adecuación de infraestructura en el hospital, que serán socializadas la próxima semana; por otro lado, destacó la disposición del Ministerio en apoyar a la ESE con el resonador, que –dijo– “esperamos sea instalado con prontitud para reducir el número de remisiones”.
Por último, anunció varios proyectos de inversión aprobados por el ente territorial y el Ministerio, con los cuales se anhela mejorar el servicio y gestionar con propiedad la necesidad de ampliar la infraestructura y la oferta de servicios de los centros de atención en San Andrés.