Si mi tío tuviera tetas

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En esta contienda electoral se han transmitido una proliferación de debates a través de los medios donde los candidatos presidenciales han dado a conocer sus planes de gobierno, lo que nos ha permitido conocer más a fondo a cada uno. Y eso está bien.

Sin embargo  con  miras a conseguir respuestas explosivas y un raiting superior, se han hecho preguntas desatinadas y me muerdo la lengua para no usar otro calificativo, que avivan esta nueva campaña.

Lo mediático nos tiene abrumados y la contienda ha tenido unas facetas oscuras que avergüenzan.

No solamente algunos de los candidatos se acusan, si no que se descalifican, se atacan y muestran su lado desafortunado, que a algunos les ha restado votos.

Pero lo que más ha sorprendido es la salida de su cauce de los medios de comunicación que en aras de más información, han realizado las preguntas desatinadas que insisten ante los candidatos con situaciones hipotéticas referentes a Venezuela y Ecuador y que les ha abierto la puerta a los mandatarios de ambos países para irse lanza en ristre contra el país, deteriorando aún más las relaciones internacionales. Y digo al país porque con ello se arrastran diferentes consecuencias que nos atañen a todos.

A pesar de que algunos candidatos se refieren a estas preguntas con respuestas iniciales prudentes, los comunicadores insisten hasta lograr cualquier comentario extremo.

¿Qué clase de periodismo hacemos en Colombia?

¿Hasta que punto la torpeza de unos cuantos periodistas afamados incita y echa sal en las heridas y provoca una polémica que puede llevar a la guerra?

No es prudente hacer preguntas hipotéticas y menos en una contienda electoral pues tiende a polarizar el debate político. Aunque si es necesario hablar de lo internacional. Pero de otra manera.

Durante años le pregunte a un amigo que me acompañó por la vida, ¿si sucediese tal cosa tu que harías? y él siempre me contestaba: si mi tío tuviese tetas fuera mi tía, y allí acababa todo. Tenía razón.

Lejos están de la candidez éstas preguntas políticas; han revuelto el avispero, la más delicada polémica internacional que nos ha costado un vecindario alterado que se había desacalorado con las excusas y el silencio y que hoy se vuelve a reavivar y que puede dar al traste con la economía, la paz y muchos factores adicionales comunes entre los países vecinos.

¿En caso de que los periodistas fuesen más prudentes que pasaría?  Una reflexión también hipotética para celebrar, a destiempo, el día del periodista.

 


 
Última actualización ( Sábado, 01 de Mayo de 2010 11:05 )