A propósito del lamentable incidente producido el sábado pasado entre dos lanchas y que fuera ampliamente difundido por redes sociales, el capitán de la embarcación que embistió a la otra, dio un pormenorizado testimonio de lo sucedido que en aras de la equidad informativa, se publica a continuación.

Ricardo Álvarez, capitán de la embarcación menor, 'La Paisita', relató lo que sucedió y recalcó que se excedió en la fuerza para mover la lancha 'contraria' (llamada Alburquerque), pero que en ningún momento tuvo intención de agredir a nadie.

Descripción de los hechos

El barco turístico Tritón y La Paisita se disponían a dar su primera salida de la noche del tour de la 'Noche Blanca' ese sábado hacia las 7:00 p.m., cuando se encontraron en el canal a otra lancha que obstaculizaba el paso.

“Como auxiliar de la lancha de apoyo del Tritón, me acerqué para pedirles que dieran paso; pero uno de ellos, que parecía el dueño del bote se negó, y en medio de insultos me decía: el mar no es tuyo, no es de nadie’.

De ahí me comuniqué con Guardacostas, los puse en conocimiento de la situación; les dije que estaban tomando (sic) y que no tenían luces, algo muy importante para una embarcación. La autoridad llegó, me pidieron el nombre y simplemente dijeron que ellos lo solucionaban”.

En esa primera instancia el capitán del barco Tritón supo maniobrar y pudo salir, aún con riesgo de empropelarse (sic), con la lancha en medio del paso.

Para la segunda salida del Tritón, hacia las 11:00 de la noche, esa lancha seguía ahí y nuevamente se les pidió moverse, sin éxito. Ahí el Tritón se empropeló con el ancla de la lancha que bloqueaba el paso y tuvimos que tomar la decisión de cortar el cabo de su ancla.

Seguidamente de que mis compañeros fueran a intentar cortar el cabo, de esa lancha comenzaron a tirar objetos y a amenazarnos diciendo ‘usted no me conoce’ y gritando frases racistas. Se pasaron a nuestra lancha a caerle a golpes a mi compañero, quien también se esforzaba por maniobrar la moto nave para que no encallara o se volteara.

Ahí fue donde tomé una mala decisión, me puse muy nervioso y quise quitarlos, pero me excedí en fuerza; mi intención no fue hacerles daño, sólo quise evitar una tragedia mayor.

La embarcación Tritón, con 185 personas a bordo, corría el riesgo de quedar encallado en el bajo que hay en el sector si no se liberaba la lancha apartándola del barco o cortando el cabo que lo tenía empropelado.

Yo nunca amenacé ni dije nada a nadie, yo sólo quería mover la embarcación y lo que pasó fue producto del momento…”.

Según Álvarez, Guardacostas acudió al sitio después de la colisión, luego de que tras el primer episodio, al parecer, no hicieron que la lancha se moviera.

“Esto ustedes lo pudieron evitar, porque no hicieron nada”, les reclamó el capitán de La Paisita.

Fuentes de la empresa propietaria del Tritón, afirmaron que internamente se abrió un tema disciplinario en contra del capitán del bote auxiliar; “se llamó a descargos, se oyó lo que tenía para decir y se está evaluando una sanción”.

También se supo que Guardacostas envió un requerimiento a dicha compañía, la cual acudirá a una audiencia este viernes con todas las pruebas recaudadas para demostrar que su embarcación estuvo obstruida en su paso y todo el contexto de la situación que tuvo como desenlace la desafortunada reacción de Álvarez.