Este jueves se cumplieron 50 días de la ‘toma’ que líderes y activistas raizales mantienen en el predio contiguo a la construcción del comando de la Policía Nacional en la avenida Newball. Habla miss Ofelia Livingston de Barker, una de las voceras de los manifestantes.

Como se recordará el 3 de mayo comenzó esta protesta pacífica, en contra de la cesión de este y otros lotes entregados por la Entidad Territorial a varias agencias del orden nacional; los que una vez cumplido el servicio por el cual fueron otorgados, no fueron devueltos al Departamento o incluso fueron vendidos a terceros.

La líder raizal dijo que durante estos 50 días se avanzó en el sentido de que se han mantenido firmes y que perseverarán en su intención de que éste y otros lotes sean restituidos a la entidad territorial, muy a pesar de la negativa de la Policía a devolver el predio de manera voluntaria.

Respuesta

“La Policía Nacional ya contestó a la Gobernación diciendo que tienen la posesión y el dominio –más no la titularidad– sobre el terreno. Tenemos entendido además que se presentó una querella policiva, entonces estamos esperando ser notificados del resultado”, agregó.

La líder raizal también comentó que este jueves se radicó una nueva carta donde se solicita a la Gobernación demandar a dicha institución buscando la restitución del predio; procediendo así en una nueva instancia a partir de la respuesta negativa de la Policía.

“Una vez se tengan los documentos de dicha demanda, estableceremos una mesa de conciliación con la Procuraduría y Defensoría del Pueblo para, entre otros asuntos, garantizar que la Policía no toque el predio hasta tanto no se tenga la respuesta del fallo, sea a favor o en contra”, manifestó la líder cívica.

La instalación de la mesa es independiente del levantamiento o no de la toma en el predio. “Esa es una decisión de la mayoría y la respetaremos”, añadió.

Por último, invitó a los habitantes de las islas a un evento cultural y religioso que se realizará este y cada viernes de 5:00 a 6:00 p.m. en el mencionado lote.

“Los residentes que sean conscientes y apoyen la causa, pueden ir y disfrutar con nosotros de ese espacio cultural; igualmente pueden colaborarnos si así lo desean, con víveres, agua o refrescos, todo sirve para mantener esta toma –que no ha sido facil– por la dignidad del pueblo de las islas”, concluyó Livingston de Barker.