“San Andrés, mi segundo hogar”: un turista enamorado

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Con las mejores playas del Caribe, su mar de siete tonalidades, arena blanca y tranquilidad, el Archipiélago de San Andrés ha sido por años el lugar de descanso por excelencia y el mejor destino de sol y playa para pasar unas buenas vacaciones tropicales.

Este pedacito de tierra se ha ganado el amor de viajeros de todo el mundo que atesoran en su corazón los mejores momentos allí vividos. Esta es la historia de Gerardo Clavijo Fúquene, un enamorado de la isla, quien lleva 23 años visitando estas tierras.

Por allá en el año 97, Gerardo arribó por primera vez junto a su familia a San Andrés. La familia procedente de la capital del país, que entonces estaba conformada por tres integrantes, quedó flechada en el instante que vieron por la ventanilla del avión, semejantr obra natural.

Como si fuese una tradición, 23 años después siendo ahora una familia más numerosa San Andrés vuelve a ser el sitio elegido para celebrar unidos una serie de eventos que presagiaban el 2020 como un año muy especial. Sin embargo, las vacaciones planeadas para el mes de junio se vieron truncadas tras declararse la emergencia sanitaria.

Aun, con expresión de asombro y los ojos muy abiertos Gerardo, valoró como ¡Traumática! la noticia de no poder viajar, “fue un baldado de agua fría”, enfatizó expresando el matiz de un año lleno de sucesos inesperados. Así que no les quedó más que aceptar las circunstancias y esperar hasta nuevo aviso la reapertura del destino.

Durante el tiempo de cuarentena él y su familia estuvieron en confinamiento estricto. Su esposa estuvo trabajando desde casa, sus hijos culminando los estudios en formato virtual y él, quien se encuentra en condición de silla de ruedas por un accidente ocurrido hace 22 años, durante todo ese tiempo con servicio médico domiciliario.

Sin embargo, siempre vuelve la luz tras las penumbras. Y esa luz de esperanza llegó al recibir la llamada que esperaban de parte del Hotel Isleño Decameron, con quienes por años han planeado sus vacaciones en San Andrés.

En efecto, al otro lado de la linea y con gran entusiasmo, la persona asignada para dar esta gran noticia les anunció la pronta reapertura del hotel y con ello el disfrute de un merecido descanso y distracción luego de meses de encierro.

Bodas de plata

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“En ese momento sentimos una inmensa felicidad –expresó Gerardo– por fin ha llegado el momento de celebrar nuestras fechas especiales en familia; los cumpleaños de los hijos y mi nuero, los logros académicos de mi hija menor y junto a mi esposa las bodas de plata tras 25 años de casados”.

Y llegó el inolvidable día 7 de octubre de 2020. Maletas van, maletas vienen. Algarabía, felicidad y la sensación indescriptible de por fin salir de casa y dejar a un lado la rutina luego de ocho largos meses de confinamiento.

Llegar a San Andrés es para Gerardo, sinónimo de vida “el solo hecho de estar ya en este clima me trae tranquilidad” y es que él siente que tiene una ‘conexión especial’ con la isla, un lazo de armonía y paz difícil de romper.

La bienvenida por parte del hotel le puso la ‘piel de gallina’; la alegría, los aplausos la música, el baile… Invadieron cada rincón del lugar y con ello los corazones no solo de Gerardo y su familia sino también, los de cada uno de los huéspedes que al igual que ellos esperaron por meses este día.

“Esta es la séptima vez que vengo a la isla y seguiré viniendo con mi familia hasta que la vida me lo permita”, expresó Gerardo, quien fascinado por la atención de la gente, el paisaje, la naturaleza y la armonía de la isla ha hecho tanto de San Andrés como del Hotel Isleño Decameron, su segundo hogar.

Y es que aparte de disfrutar de la isla, Gerardo vive agradecido con cada uno de los miembros de personal del hotel; por su tiempo, atención, dedicación. Por cada sonrisa, por la amabilidad y las charlas por los pasillos. “La calidez y el acogimiento que tienen para nosotros es definitivamente maravillosa”.

En ocasiones la gente le ha aconsejado visitar otros destinos de sol y playa y su respuesta siempre ha sido contundente y firme, “lo que encuentro en San Andrés no le he encontrado en ninguna otra parte”.

Última actualización ( Martes, 13 de Octubre de 2020 09:22 )