Policarpo Guerrero siempre recordaría el día en que se vio por primera vez en un espejo. Fue la tarde de un Abril que se le perdió en el recuerdo de su memoria como muchas otras cosas. Últimamente tenía que anotarlo todo para saber cómo en la peste del olvido de 100 años de Soledad cómo se llamaban las cosas y en qué lugar podía conseguirlas.