En el café que se hace bar de noche, en la mesa de la derecha junto a la ventana cada mañana ella ordena lo mismo: café negro sin azúcar, jugo de naranja del día, también sin azúcar y una servilleta extra. Cada mañana sin falta, se toma el café a sorbos, intermitentemente con el jugo de naranja, como quien corta el sabor amargo con sabor amargo.