San Andrés se llenó de color con la primera versión de esta actividad, que se desarrolló en la plazoleta de Rock Hole y tuvo como principal objetivo el fortalecimiento de los saberes de la tierra a través del empoderamiento de las nuevas generaciones en lo que significa cultivar en el territorio insular.
Cerca de 12 huertas escolares y dos comunitarias fueron parte de esta estrategia de la Secretaría de Agricultura y Pesca, que también tuvo como invitados al Jardín Botánico y el Instituto Colombiano Agropecuario. Todas las sinergias interinstitucionales se reunieron en torno a apoyar a los niños que, poco a poco, van aprendiendo el oficio de la agricultura.
Plátanos, mermeladas y jugos de june-plom fueron algunos de los productos más apetecidos por los visitantes que desde muy temprano acudieron a la cita con el presente y futuro del departamento. Acompañados de sus docentes y sabedoras de la tierra, los niños fueron protagonistas de una feria alegre y llena de vida.
En el evento hicieron presencia el Gobernador de las islas, Nicolás Gallardo y el secretario de Agricultura y Pesca de San Andrés Christian Harvey, quienes hicieron un recorrido por cada uno de los stands de los pequeños agricultores y remarcaron la necesidad de seguir apoyando este tipo de iniciativas que propenden por una soberanía alimentaria.
Es preciso acotar que por medio de estas huertas se transmiten valores importantes como el respeto, la tolerancia y la paciencia, pues se requiere de estas cualidades para sembrar; esperar la germinación del fruto es una tarea que requiere de tiempo y constancia y sobre la cual se espera seguir haciendo hincapié en la juventud de las islas.
PROTAGONISTAS
Una de las sabedoras que acompañaron este evento fue Rosmira Biscaino, quien acompañó a los niños de la huerta de Elsy Bar a presentar sus productos en esta gran ventana y de esta manera dar a conocer los esfuerzos que vienen realizando por la conservación de la memoria agrícola.
“Se trata de enseñar a los niños a que se enamoren de la tierra y produzcan su propia comida, sana y sin aditivos. Esto les enseña a ellos a valorar sus capacidades y los va a introducir en la conciencia de impulsar la agricultura en el departamento, el cual es una tierra fértil que nos dio Dios”, señaló.
Por su parte, Clara Vargas, coordinadora del programa de seguridad alimentaria de la Secretaría de Agricultura y Pesca, indicó que estos espacios son fundamentales para el departamento y que recibieron con gran regocijo el acompañamiento de la comunidad, haciendo que la Feria Agro-educativa fuera todo un éxito.
Luego de la feria es imposible no mirar por el espejo retrovisor y tener la sensación de que se deben seguir propiciando estos espacios para la juventud, comúnmente perfilada hacia otros oficios, para tratar de inculcar en esta el sentido de pertenencia por los saberes de la tierra y la importancia de cultivar el futuro del archipiélago.
