La Corporación para el Desarrollo Sostenible de San Andrés, Providencia y Santa Catalina (Coralina), notificada del fallo del Tribunal Contencioso Administrativo de San Andrés para la “protección de los derechos e intereses colectivos” en el Johnny Cay Regional Park (JCRP), adelantó los compromisos adquiridos que permitieron la actualización de su Plan de Manejo Ambiental. A continuación, su versión actual de la realidad.
En dicho fallo se concede “…el amparo de los derechos colectivos al goce de un medio ambiente sano y la existencia del equilibrio ecológico, el manejo y aprovechamiento de los recursos naturales renovables, para garantizar su desarrollo sostenible, su conservación, restauración o sustitución, la conservación de las especies animales y vegetales y la protección de áreas de especial importancia ecológica”, entre otros.
Dichos argumentos invocados por la Procuraduría Delegada para Asuntos Ambientales y Agrarios en contra de Coralina y otros, lograron que se ordenara la actualización del mencionado plan (de Manejo Ambiental del JCRP), a efectos de que corresponda a una visión actual e integral de la problemática, para lo cual se concedió un término de seis (6) meses, contados a partir de la ejecutoria de la sentencia.
En este plan la corporación proyectó la implementación de políticas de competitividad, ecoturismo, turismo social y cultural, mercadeo y promoción turística, lineamientos de políticas para el desarrollo de turismo comunitario, calidad turística, playas turísticas, turismo y artesanía.
Herramienta de planificación
Teniendo en cuenta el contexto de amenaza regional del Archipiélago resultado de la sobrepoblación, turismo masivo y otros factores naturales que pueden poner en riesgo los ecosistemas marinos y costeros del Caribe, Coralina, identificó la necesidad de diseñar un instrumento de planificación para Johnny Cay que sirviera de guía para el desarrollo de programas que contribuyan a la conservación, recuperación y mejoramiento de las condiciones ambientales del área, mediante un proceso participativo tanto a nivel interinstitucional como comunitario y productivo.
De este proceso surgió la primera versión del Plan de Manejo del JCRP. Consecuentemente, por medio de la Resolución No. 161 del 07 de marzo de 2002, la corporación adoptó el Plan de Manejo y de Sostenibilidad Financiera de esa área protegida, que incorporó información ambiental y socioeconómica, con el fin de abarcar todos los ámbitos de influencia de la zona objeto de manejo y poder identificar las estrategias más adecuadas para restaurar / rehabilitar / reforestar o mantener la prestación de los bienes y servicios ambientales que brinda el área protegida.
En síntesis, a través del plan se identificaron aspectos que sirven de base para administrar y orientar el uso sostenible del área protegida, con miras a la conservación de los recursos marinos y terrestres.
Además, Coralina realizó diferentes gestiones para la actualización y complementación de los planes de manejo de los tres Parques Naturales Regionales administrados por Coralina, a la luz de la normatividad vigente y desde 2015 se cuenta con un documento técnico de propuesta de ajuste al plan de manejo del JCRP.
De la misma manera, otros insumos igualmente importantes, con los cuales se actualizó la información y se hicieron varios análisis que han permitido ir mejorando la planificación y manejo de esta Área Protegida. De este modo JCRP es un área protegida cuyo instrumento de planificación actualizado (actual plan de manejo) es coherente con los demás instrumentos de planificación del archipiélago y contribuye con recursos económicos para la protección y conservación de las otras áreas protegidas del Departamento Archipiélago.
En el caso de JCRP junto a Old Point Mangrove Regional Park en San Andrés y The Peak Regional Park en Providencia, conforman el grupo de tres parques naturales regionales adjudicados a Coralina para cumplir con las funciones de conservación, desarrollo sostenible y cooperación en la Reserva de Biosfera Seaflower, según lineamientos de Unesco.
Situación actual
En la actualidad JCRP es un buen ejemplo de sostenibilidad financiera en el Archipiélago, el cual, a pesar de atraer miles de visitantes anualmente (locales y turistas), logra mantener la integridad ecológica y las metas de conservación institucionales de la mano de la conservación de los recursos naturales por parte de una comunidad étnica local y residente de las islas.
La adopción por parte de Coralina de la actualización del Plan de Manejo JCRP constituye en un avance significativo hacia la planeación y manejo efectivo del área y sus ecosistemas, los cuales estaban sometidos a presiones antrópicas significativas por actividades turísticas masivas (desde antes de 2002), las que, además, han venido incrementándose en el tiempo, sumadas a la sobre-explotación de recursos marinos y terrestres que han llevado a que la zona marina y terrestre tanto en San Andrés como en Johnny Cay Regional Park se encontraran en un alto grado de deterioro (Fundación Providence, 2014).
Sin embargo, con la implementación del Plan de Manejo del Parque entre 2002 a 2018 y las mejoras en las acciones de manejo y conservación, sumadas al control y vigilancia del Parque llevadas a cabo por Coralina, las especies y ecosistemas del JCRP hoy se encuentran en buen estado de conservación (Invemar, 2017).
Consideraciones finales
A lo largo de los últimos años, el JCRP ha atravesado algunas situaciones que lo catalogan como un destino turístico maduro; una de esas situaciones es la solicitud que fue instaurada ante el Tribunal Contencioso Administrativo por parte de la Procuraduría General de la Nación a través de la delegada para Asuntos Ambientales, en la que solicitaron tomar medidas para garantizar la seguridad, salubridad y medio ambiente sano y la reevaluación del régimen de ingreso de turistas y de las actividades comerciales realizadas dentro de él.
Esta Acción Popular se instauró también ante algunos hallazgos relacionados con el riesgo para los turistas ante la inexistencia de un muelle adecuado para desembarcar, la cantidad de turistas que rebasaba la cantidad permitida en el cayo según estudio de capacidad de carga que era de 8542 personas (Plan de Manejo 2002).
Por último, el presente programa del Plan de Manejo del JCRP ha sido fruto de un esfuerzo en conjunto, donde la recopilación de información ha sido gestionada a partir de una metodología de fuentes secundarias y pretende ante todo, la creación de una alianza público – privada para la búsqueda de beneficios mutuos.
Esto es en síntesis, la creación de soluciones innovadoras partiendo del conocimiento acumulado y de una cultura de adaptación continua, a fin de crear una potente red de gestión del conocimiento e innovación en la oferta ecoturística, más el diseño e implementación de un ordenamiento acorde a los nuevos factores determinantes de los cambios del sector.