La Secretaría de Agricultura Departamental en el marco del Comité de Sanidad Vegetal, representado por varias instituciones relacionadas con el tema, hizo un reconocimiento de diferentes sectores de la isla donde se concentra vegetación de cocoteros, para verificar el estado de esa especie vegetal.
Tras la valoración de dos especialistas, se diagnosticará el estado en general de esa vegetación –emblemática de la región insular–, que se completará del 17 al 19 del presente mes.
La primera fase de valoración, se concentrará en las áreas de San Andrés donde se evidencia deterioro e incluso mortalidad de palmeras. Allí se tomarán muestras, que serán llevadas a laboratorios para conocer las causas de esta situación; información que permitirá aplicar los correctivos necesarios para rescatar las palmeras.
Cabe resaltar –dice el comunicado– que en 2016, la Secretaría de Agricultura reforestó 1.4 kilómetros de cocoteros en la isla.
¿Análisis tardío?
Como se recordará, la semana anterior un cocotero literalmente le cayó encima a un joven turista en el sector de San Luis, mientras buscaba sombra debajo de él. Al mismo tiempo, a través de las redes sociales se supo de varias denuncias sobre el mal estado de otras palmeras sin una aparente intervención temprana de las entidades ambientales encargadas.
Al tiempo, cursa en la Asamblea Departamental, una proposición elevada por el diputado Bradison Fernández Bryan para proteger esta especie emblemática del archipiélago y dada la escasez del coco en las mesas de los isleños; fruto que otrora representó un renglón importante en la economía de las islas, donde mas del 50% de su producción era materia de exportación.