Por estos días en que la salud del gran líder universal de los Derechos Humanos, Nelson Mandela, pende del hilo sagrado de los designios de Dios; rescatamos de nuestro archivo las palabras del entonces (1987) embajador de Colombia ante las Naciones Unidas, Kent Francis James, pronunciadas con el objeto de fijar ante el organismo una posición de rechazo frontal ante el apartheid y reclamar la libertad del luchador sudafricano (N. de la R.).